Marisa Sánchez Barbero, alma máter de la asociación Amal de Amigos del Pueblo Saharaui, ha alcanzado su jubilación después de su vida laboral.
Por tal motivo, alrededor de medio de centenar de amigos se ha dado cita en un almuerzo celebrado hace unos días para tributarle un homenaje. El acto ha sido organizado por antiguos trabajadores docentes y no docentes del Instituto Cuatro Caminos, donde Marisa ha trabajado en los últimos años.
El acto resultó muy emotivo y gratificante para ella y para todos los que la acompañaron. Estuvo coordinado de manera sobresaliente por Fidela Centeno, compañera de Marisa en la secretaría del mencionado centro educativo.