Jorge Díaz Sánchez, el flamante ganador de Supervivientes 2016, regresó este viernes, 15 de julio a su pueblo, Medellín, tras adjudicarse el triunfo absoluto en el famoso concurso de Tele 5.
El modelo llegó al caer la tarde a la plaza de Hernán Cortés a bordo de un automóvil procedente directamente de Madrid, acompañado por sus padres, Vicente y Cecilia. Nada más bajarse del coche saludó a la multitud congregada exhibiendo en primer lugar el gigantesco cheque de 200.000 euros que le han dado por ganar Supervivientes.
“Pero si está aquí todo el pueblo entero”, han sido las primeras palabras pronunciadas por Jorge mientras se llevaba la mano a la frente en señal de asombro por el recibimiento que le estaban dispensando sus vecinos y paisanos.
A continuación, la gente se le echó encima en forma de besos, abrazos y peticiones de posados para fotos. Una de las instantáneas más curiosas fue la protagonizada por el modelo junto a un grupo de niños y niñas. El modelo exhibía su delgada silueta, aunque confesó que tras regresar de la isla había engordado diez kilos.
Poco a poco, Jorge fue sorteando a admiradores y admiradoras hasta llegar a la puerta del ayuntamiento, donde le aguardaba el alcalde de Medellín, Antonio Parral. El primer edil dio la bienvenida al modelo y le entregó un busto de Hernán Cortés como regalo protocolario del consistorio por la gesta de Jorge en el concurso y pasear el nombre de Medellín en televisión.
El ganador de Supervivientes dio las gracias por el recibimiento y se comprometió a fotografiarse con todos y cada uno de los asistentes.
Seguidamente, Jorge atendió a los medios de comunicación a pies de la estatua de Hernán Cortés, sintiéndose orgulloso de “haber conquistado Honduras”. Después siguió haciéndose fotos con sus paisanos hasta bien entrada la noche.