Tras ocho meses caminando, unos 5.000 kilómetros recorridos, 25 kilómetros diarios de media, y cargado de experiencias y momentos inolvidables, llegó a Villanueva el villanovense Manolo Calderón Hidalgo, tras recorrer España a pie.
Vuelve cargado de su mochila, pero sobre todo cargado de vivencias, emociones, recuerdos, y momentos que siempre conservará en su memoria. Un viaje, un reto personal y una aventura que inició en mayo pasado, pero que lo comenzó mucho antes, lo planeó en la pandemia. Era el momento de transformar su vida y realizar un viaje por España. Un camino que, al mismo tiempo, le ha supuesto realizar viaje interior a lo largo de estos meses, y que a buen seguro le ha cambiado.
En su llegada a casa, y llegar a la meta de su camino “Camino Arbórea”, Manolo Calderón recibió, el ánimo, el apoyo y el reconocimiento de muchas personas que le quisieron dar la bienvenida; arropándolo en los últimos metros que recorrió hasta la meta, que quiso que coincidiera con su cumpleaños. Y, según sus propias palabras, “tiene el mejor regalo que se puede tener, el cariño de las personas”, la que conoce, como es su familia y amigos; y todas las que ha ido conociendo en estos meses.
A su llegada a la plaza de España, explicó que esta experiencia la ha servido para evaluarse, saber cómo enfrentarse a situaciones “que desde el sofá de casa las pensamos de una forma, pero que nunca son como imaginábamos”.
Reconoció que cuando salió de casa, “yo sabía quién era, pero no sabía de mi fortaleza y me ha servido para valorar algo que tenía en la mochila, pero que no había tenido oportunidad de conocer”.
Una experiencia de este tipo debemos hacer, “no digo hacer 5000 kilómetros, pero sí algo que realmente nos entusiasme, que nos permita alejarnos de nosotros mismos, tener perspectiva y saber cómo somos y cómo desenvolvernos. Enfrentarnos a los momentos en los que no podemos seguir, pero que nuestra fuerza interior nos impulsa”.
Calderón expresó que él tenía la teoría de que las personas son mucho mejor de lo que parecen, una teoría que “he podido comprobar, y la humanidad es lo mejor. Somos humanos, somo mejor de lo que creemos porque lo que nos mueve es el corazón”. Un viaje, añadió, en el que no ha tenido en ningún momento prisa, “porque quería traerme lo máximo a casa”.
Emocionado, por lo conseguido y por esta bienvenida, el alcalde Miguel Ángel Gallardo también quiso recibirlo en la plaza de España, felicitándolo por lograr este reto y llevar el nombre de Villanueva de la Serena por todo el país. Además, destacó que fue capaz de materializar una meta, un sueño, a pesar de las dificultades que se pueden encontrar en el camino. Lo que demuestra, expresó, que hay que perseverar y cuando se tiene un sueño, lo puede hacer realidad.