Fernando el Católico ha sido recordado como un "modelo" a seguir que supo tener "sentido de Estado" y anteponer las necesidades de la población a su bien común.
Así ha sido definido el monarca durante los actos de conmemoración del quinto centenario de su fallecimiento en Madrigalejo (Cáceres) el 23 de enero de 1516 y que hoy ha acogido la localidad extremeña.
En dicho acto que ha comenzado con el desfile de la Guardia Real y la visita a la casa de Santa María de Guadalupe, donde falleció el monarca, han estado representadas las diferentes instituciones de la región con la portavoz de la Junta de Extremadura, Isabel Gil Rosiña, el presidente del Partido Popular, José Antonio Monago, La Presidenta de la Diputación de Cáceres, Rosario Cordero y el alcalde de la localidad, Sergio Rey.
La portavoz del gobierno regional ha precisado que el testamento de Fernando el Católico, redactado en sus últimos días de reflexión antes de su fallecimiento es, sin lugar a duda, el documento jurídico "más importante" firmado en Extremadura. Al respecto, ha detallado que la Junta de Extremadura continuará con su labor de promoción de la cultura en su compromiso de avanzar. Por ello, trabaja en la difusión, ha asegurado, del patrimonio material e inmaterial de la región ya que, "el conocimiento de nuestro pasado nos ayudará a construir un futuro mejor", ha finalizado.
Por su parte, el alcalde de Madrigalejo ha hecho hincapié en la relevancia histórica de los hechos que hoy recordamos puesto que fue en la localidad cacereña donde el monarca cerró el círculo de su último legado y unificó bajo una misma corona todo el territorio español. Por eso, ha explicado que "debemos" sentirnos "orgullosos" de ese instante que necesita ser recordado "ahora más que nunca" en los momentos de transición que vivimos.
Así se ha dirigido a los extremeños con el orgullo de pertenecer a dicha región y al papel que juega en la historia de España. Orgullosos, ha insistido, de "nuestro pasado" puesto que "aquí murió el Rey y nació España".
Con la conmemoración de los quinientos años de la muerte de Fernando el Católico se reconoce la labor de las diferentes instituciones por mantener este lugar en la historia de España, según Rey. Un esfuerzo que vienen realizando en los últimos años el Ayuntamiento de Madrigalejo junto a la Fundación Academia Europea de Yuste y la colaboración de empresas como Iberdrola por conservar la última morada del Rey.
Se trata de una antigua casona de labranza situada en la zona más alta del municipio y cuya fachada aún conserva una placa en la que se recuerda que aquí fallecidó el primer Rey Católico de España.
De ella se conserva el pajar de vigas de madera que ha resistido al paso del tiempo y que hace apenas dos años fue restaurado. En este lugar fue donde pasó sus últimos días el monarca, donde firmó su cuarto y último testamento, anulando los anteriores y cuya rúbrica, difícilmente legible, adelantaba el desenlace. Aquí se conserva un facsímil de documento (el original lo custodia la Casa de Alba) y del que esperan reproducir una segunda edición para la apertura del centro de interpretación que se ubicará en la localidad.
Estas cuatro paredes albergan gran parte de la historia de nuestro país, representada en sus azulejos en los que se aprecia el escudo y el castillo de la unidad española.
Esta conmemoración, declarada "Acontecimiento de Excepcional Interés Público" incluye un amplio programa de actividades que se desarrollará a lo largo de todo el año.
