El vídeo que encabeza esta noticia es un ejemplo más de los efectos que produce el camalote en el río Guadiana. En este caso es un pescador el que graba y a la vez relata la impotencia ante esta catástrofe.
El desastre natural del camalote viene repitiéndose año tras año prácticamente desde el inicio de este siglo con la falta de acción de distintas administraciones de uno y otro signo. En las últimas semanas hemos tenido conocimiento que la Confederación Hidrográfica del Guadiana y la Junta de Extremadura van a remar juntos en la misma dirección de subsanar el problema.
Esperemos que sean perserverantes y constantes en el empeño y pronto estas imágenes sean solo un mal recuerdo.