Un año más, la ladera del castillo de Medellín acogió el Belén Viviente escenificado por vecinos de la población.
En la puerta de la iglesia de Santiago se podía ver el nacimiento, con San José María y el niño. Sus Majestades los Reyes Magos acudieron a adorar a Jesús y obsequiaron con decenas de caramelos a los niños asistentes.
También se recreó el palacio de Herodes, las típicas estampas de lavanderas y mercado y el trabajo de artesanos y pastores.