La Asociación de Profesionales del Metal (Asprometal) ha mostrado su preocupación por la bajada de los salarios en el sector, la temporalidad de los contratos, las horas extras encubiertas, la falta de formación de calidad para profesiones que se van perdiendo, la falta de reforma estructural en el modelo productivo y el encasillamiento en un país de servicios.

Según explica Asprometal en Extremadura, los trabajadores del sector del metal están preocupados especialmente por dos temas que les parecen muy importantes y graves.
Por un lado está el futuro de las pensiones. “No somos una excepción, esto le preocupa a toda la sociedad, nos vemos en un futuro, después de años de trabajos muy duros, muchos sacrificios personales y familiares, cobrando una pensión que, nos tememos, no nos dará para vivir con mínima dignidad”.
Otra de sus mayores preocupaciones es la edad de jubilación. “Se habla en medios políticos, económicos y en algún tipo de medios de comunicación, de la necesidad de ampliar la edad de jubilación más allá de los 65 años, para algunos, y de 67 para otros. Nuestro sector es un sector donde el trabajo, sobre todo, es muy físico. Alguien podría decir que como todos, pero no, no es como todos, aunque si como algún otro.
La industria del metal, que además de estar formada por fábricas de automóviles, talleres de carpintería metálica y un largo etc de variantes, tiene un sector específico con un particularidad y grandes diferencias que lo distingue de otros.
El montaje, que generalmente se dedica a la construcción, reparación y mantenimiento de grandes obras como refinerías, plantas térmicas, plantas termo solares, fábricas de la industria alimentaria, de saladoras, ciclos combinados, construcción de grandes buques, etc, está formado por una serie de profesiones entre las que se encuentran tuberos, soldadores, caldereros, montadores de andamios, califugadores, montadores de estructuras, ajustadores, mecánicos, eléctricos , etc.
Todos estos trabajos se realizan, mayoritariamente, a través de empresas auxiliares del sector y con contratos por finalización de obra. Si bien es verdad que dichas empresas auxiliares suelen tener trabajadores en plantilla, pero no todos los que se necesitan para hacer una obra, por lo que la generalidad es el contrato por finalización de obra y el de obras y servicios.
Los trabajos conllevan unas características como son, los trabajos en altura, la toxicidad, trabajos en posiciones difíciles y arriesgadas y los desplazamientos, que hacen que de estos oficios requieran unas condiciones físicas que, obviamente, no se mantienen en el tiempo.
En España existen sectores con particularidades especificas como la minería, los trabajadores del mar y los Cuerpos y Fuerzas del seguridad del Estado, que cuentan con un régimen especial de jubilaciones antes de los 65.
“Nuestro deseo sería que se tuvieran en cuenta todas las características que se han nombrado y las que saldrían si alguien se decidiera a hacer un estudio detallado de lo que es trabajar en las condiciones en las que se trabaja en el sector del metal ...condiciones toxicas, penosas y peligrosas”, añaden.