La Guardia Civil ha detenido a dos vecinos de Toledo, como presuntos autores de un delito de tráfico de drogas.
Agentes de la Patrulla Fiscal y de Fronteras, dentro de los servicios preventivos contra el tráfico de sustancias estupefacientes, establecieron un punto de verificación en la carretera A-66 en el término municipal de Calzadilla de los Barros, y observaron al conductor de un vehículo, que al percatarse de la presencia policial, hizo caso omiso a las señales luminosas que le realizaron los agentes, aumentando la velocidad y emprendiendo la huída.
Comunicado el aviso a la Central Operativa de Servicios, ésta coordina a las patrullas existentes para su localización, siendo localizado en la A-5 en el término municipal de San Pedro de Mérida, donde arrojaron una mochila por la ventanilla que contenía en su interior cuatro kilos y medio de hachís distribuidos en tabletas y una bolsa con cien gramos de cocaína en roca. Droga de la que se obtendrían 18.400 dosis en el mercado ilícito.
Con esta operación, la Guardia Civil impidió que la droga intervenida, procedente del sur de la península, fuera transportada hacia Toledo, lugar de residencia de los ahora detenidos, para su supuesta distribución y venta.
Las diligencias instruidas, junto con las personas detenidas, fueron puestas a disposición de los Juzgados de Instrucción de Zafra, quien decreto el ingreso en prisión de uno de los detenidos.